EN SU TERCER AÑO DE FUNCIONAMIENTO
CONSORCIO DE GENÓMICA FORESTAL CONSOLIDA SU GESTIÓN

Formación de recursos humanos y avances en los proyectos se han desarrollado exitosamente; una modalidad organizacional diferente al resto de los consorcios transforma a Genómica Forestal S.A. en una empresa única y que presenta grandes e interesantes desafíos.

Con la misión de desarrollar investigación que contribuya a incrementar la competitividad del sector forestal, estableciendo para ello alianzas con redes de I+D y de negocios, a nivel mundial, para la formación de especialistas y para la construcción de una plataforma de recursos tecnológicos que permita la generación de nuevos negocios, en octubre de 2006 se constituyó el Consorcio Genómica Forestal, como resultado de la primera convocatoria de Consorcios Tecnológicos de Corfo.

Entre los objetivos de esta iniciativa en la que participan la Universidad, forestales Mininco y Arauco, Fundación Chile y Cefor, se encuentran la generación de ejecución de programas de investigación y desarrollo en el área, promover el desarrollo de profesionales especialistas en materias prioritarias a este campo y la biotecnología asociada a él, así como propiciar el establecimiento de negocios y transferencia tecnológica a partir de los resultados de I+D. En su tercer año de funcionamiento, la gerente técnico del Consorcio, Sofía Valenzuela, señala que tanto la formación de capital humano en genómica forestal como el desarrollo de proyectos han ido evolucionando de manera positiva.

Los cuatro proyectos que se están desarrollando en el consorcio pasaron por la primera etapa de fenotipificación y características del material, para abocarse en los últimos años a la búsqueda e identificación de genes para esta característica.

LOS PROYECTOS

En el proyecto Genómica de la habilidad pulpable en Eucalyptus globulus, se han identificado 20 mil genes. El gran desafío, explica Sofía Valenzuela, es ver cuáles de ellos interactúan en la formación de la madera.

Más complejo debido a que su fenotipificación depende de las condiciones climáticas, el proyecto Genómica de resistencia al frío en Eucalyptus globulus presenta como gran desafío determinar el genotipo resistente a las heladas, lo que presenta un escenario impredecible cuyas variables no dependen del ser humano. 2007, explica la investigadora, fue un año en el que se registraron bajas temperaturas y se pudieron identificar 6 genotipos, al menos 3 de ellos con tolerancia a la helada.

Por otra parte en el proyecto Genómica de resistencia a Fusarium Circinatum en Pinus radiata, se ha determinado una resistencia a este patógeno (hongo causante de la enfermedad de Pitch Cranker), pero en un rango muy pequeño, explica Valenzuela. “Ya vimos que existe resistencia genética; ahora falta identificar los genes resistentes al patógenos y conocer cómo funciona esa respuesta”.

Evaluación de la función de genes candidatos en Pinus radiata a través de transformación es el nombre del cuarto proyecto que tiene entre sus objetivos desarrollar capacidades de transformación de la especie utilizando Agrobacterium para validar la acción de genes candidatos. En este caso, explica la gerente técnico, se ha desarrollado un protocolo desde el cual caracterizar el Pinus radiata con el método de transformación más óptimo. “Ya tenemos, en Valdivia, las primeras plantaciones con genes de interés. Es necesario esperar un año para lograr el crecimiento adecuado y luego tenemos como desafío desarrollar esta misma plataforma para el eucalyptus en general”.

MODELO ÚNICO

Al tener entre sus objetivos el asociarse con investigadores líderes en las áreas de investigación y desarrollo definidas, el Consorcio Genómica Forestal está asociado con el Forest Biotechnology Group de la North Carolina State University (NCSU), de Estados Unidos. Profesionales de esa casa de estudios han comprometido su participación como integrantes del comité asesor que, a nivel nacional, cuenta con la presencia de un investigador de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Entre los aspectos que destacada como positivos del Consorcio Valenzuela menciona la formación de un equipo de profesionales propios, con cuatro investigadores adscritos a él. “Aquí se generó la empresa Genómica Forestal S.A. que tiene sus instalaciones físicas en la Universidad y mensualmente tenemos reuniones del comité técnico y del directorio. Queremos seguir con ese modelo único. Es una modalidad distinta, desafiante”.

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