I+D

 

Dirección de Investigación de la Universidad de Concepción - Nº 19 - diciembre 2008

 

Portada
Editorial
Sumario
Versión PDF
Anteriores
 
Equipo
Contacto

 

Proyecto Fondecyt

Desmenuzando el IMAGINARIO SOCIAL
del “Otro” Chile

La investigación, de corte cualitativo, trabaja a través de la construcción del imaginario social del Otro detectado mediante la producción discursiva de los sujetos participante en los grupos de conversación.

El grupo pluridisciplinario de investigadores que trabaja en elaborar una radiografía nacional sobre la idea del Otro se reúne semana a semana, en torno a una mesa redonda, para revisar y discutir las ideas, construcciones y definiciones que los participantes de los cincuenta y cuatro grupos de conversaciones repartidos en Valparaíso, Santiago y Concepción, entregan en base a su propio discurso acerca del Otro, en el proyecto Fondecyt Los imaginarios sociales del otro en el Chile Contemporáneo: mujer, indígena y extranjero.

En la investigación, de orden cualitativo, participan personas seleccionadas según criterios socioeconómicos, etáreos y de género, lo que permitirá cruzar información de valor socio-antropológico y comparar eventuales comportamientos diferenciados. Además, en una última etapa se combinará la técnica de grupos de discusión con el análisis de fuentes documentales, reforzando así la visión histórica del estudio.

La idea de la investigación, que lidera el sociólogo Manuel Antonio Baeza, tiene como objeto científico de estudio la construcción imaginaria social del Otro inferiorizado en Chile, en búsqueda de estereotipos y estigmas instalados en el sentido común chileno. Este concepto debe ser entendido como la construcción de una alteridad que –al igual que un espejo- incesantemente devuelve la imagen de nuestras propias convicciones, creencias, prejuicios, estigmas, entre otros aspectos.

Para lograr sus objetivos, los investigadores seleccionaron tres personajes emblemáticos en el tratamiento de ciertos imaginarios sociales: la mujer, el indígena y el extranjero. Cada una de estas representaciones fue configurada en torno a construcciones imaginarias sociales estereotípicas con un componente en común: la inferiorización. Esta fue una selección arbitraria, indicó Baeza, que no pretende en ningún caso abarcar todas las estigmatizaciones que se han fabricado a lo largo de nuestra historia.

A la luz de diversos autores contemporáneos que desarrollan la teoría de los imaginarios sociales, dentro de los cuales Baeza es referente nacional, se indica que el tratamiento de discriminación e inferiorización obedece, en primera instancia, a la existencia de un imaginario social dominante que genera estigmas y estereotipos negativos que marcan la condición de algunos personajes y grupos diferenciándoles “valóricamente” de otros estereotipos fabricados con connotaciones positivas. Baeza señala que, por ejemplo, por el hecho de la presencia de un imaginario social dominante proclive al ideal etnocéntrico europeo, a la construcción socio-imaginaria de los inmigrantes venidos de Europa, se opone aquélla de los venidos de ciertos países vecinos asimilables al estereotipo indígena en su negatividad.

Imaginarios sociales, entonces, serían aquellos esquemas construidos socialmente que nos permiten percibir, explicar e intervenir en lo que en cada sistema social se considere como realidad. “En otras palabras, lo que entendemos por realidad social es aquello que socialmente cumple con la condición de plausibilidad al seno de la sociedad”, explicó.

La investigación, de corte cualitativo, trabaja a través de la construcción del imaginario social del Otro detectado mediante la producción discursiva de los sujetos participante en los grupos de conversación. “A través de ellos uno puede empezar a tener un conocimiento mayor de subjetividades sociales. Cómo se construye el esteriotipo, las estigmatizaciones, los discursos de corte chovinista nacional o machistas, entre otros”, señaló. Luego de un año y medio desde que comenzó el trabajo, la evidencia revela que la manera de relacionarse con el inferiorizado es principalmente mediante la construcción de diferencia en el Yo y el Otro, en los imaginarios sociales. Esto es, aparentemente, por medio de cinco tipos de orientación en las que las diferencias pueden estar basada en el tipo biológico, por ejemplo decir “esta raza es inferior”, otro es el factor de tipo psicológico, por ejemplo “la mujer es menos racional que el hombre, en ella priman las emociones”; de orden cultural, “este es un pueblo distinto del nuestro”; socioeconómico y geodiferencial.

Junto a Baeza, los co-investigadores Miguel Urrutia, sociólogo, y Andrea Aravena, antropóloga, lideran una cohorte de estudiantes de pre y posgrado, que unidos a profesionales, están conformando una masa crítica que contribuirá al desarrollo de las ciencias sociales de nuestro país.[subir]

 

 

 
     
 
 
     
 
Universidad de Concepción
® Universidad de Concepción
Dirección de Investigación