Acuicultura en zonas expuestas nuevos espacios para la salmonicultura

Es una industria joven, pero dinámica. En poco más de dos décadas, la salmonicultura nacional ha logrado situarse como el segundo productor mundial después de Noruega, país con una larga tradición en el rubro.

Y aún hay proyecciones para crecer. En el sector se apuesta a doblar la producción hacia el año 2012, lo que supone una expansión hacia áreas no ocupadas hasta ahora por la actividad que, tradicionalmente, se ha asentado en zonas costeras geográficamente (senos, bahías y fiordos).

Este es el desafío en que se inserta el Consorcio Tecnológico en Acuicultura en Zonas Expuestas (CT-OOA) que lidera el investigador del departamento de Oceanografía, doctor Hugo Arancibia (harancib@udec.cl).

La propuesta aprobada este año cuenta con un subsidio de 766 millones de pesos aportados por el Programa Bicentenario de Ciencia y Tecnología (PBCT) de Conicyt, más 300 millones de pesos aportados por instituciones participantes, entre las que se encuentran nuestra universidad, más la Universidad Católica de Valparaíso y la Fundación Chile, además de las empresas Pesquera Friosur, Servicios de Implementación Tecnológica Naval (Sitecna) y Codelco. [subir]

DESARROLLO LÓGICO

La implantación de cultivos en áreas expuestas del océano (open ocean aquaculture, OOA) es, a juicio del Dr. Arancibia, el desarrollo lógico de la salmonicultura.

Su implementación, señala, requiere saltos tecnológicos cualitativos y cuantitativos importantes para abordar el diseño, modelación y construcción de sistemas de balsas-red-anclaje (BRA) acorde a las características oceanográficas y atmosféricas de la X Región, donde se centra el proyecto.

Para esta iniciativa se está gestionando la asistencia técnica de la Universidad de New Hampshire (Estados Unidos), que es uno de los principales centros tecnológicos de OOA en el mundo. “En este tipo de iniciativas tenemos que trabajar con lo mejor que hay en el mundo para reducir la brecha tecnológica”, afirma el investigador.

Al término del proyecto, en 3 años, se espera contar con un modelo a escala real del BRA para evaluar su rendimiento productivo. Lo innovador en estos sistemas es que se movilizan desde la superficie a niveles de profundidad predeterminados, donde la energía de olas y corrientes marinas no afecten las estructuras ante episodios de mal tiempo. Esta cualidad está asociada al uso de tecnologías satelitales, tanto para dar cuenta de las condiciones del tiempo y el mar, como para operar el sistema en forma remota.

Al proyectar los impactos del cambio, el doctor Arancibia señala que el sólo hecho de llevar los cultivos a zonas más oxigenadas podría reducir las mermas en producción de salmones, que es del orden de 20% actual promedio a 5%, lo que puede redundar en un incremento neto en la producción del orden del 15%. Por otro lado, puede haber externalidades positivas de este proyecto en cuanto a reducción de conflictos por diferentes usos de las zonas costeras y en un mejoramiento de los estándares ambientales de producción.[subir]

SALMONES Y COBRE

Un aspecto destacable del proyecto es que también apoya al objetivo de Codelco de promover nuevos usos del cobre, producto que se usará en una aleación especial en las redes del sistema, uniendo en una nueva tecnología a dos productos emblemáticos de las exportaciones chilenas, como son la industria del cobre y de la salmonicultura. El potencial que representa el negocio del cobre ha atraído a dos importantes entes internacionales, con los que se está negociando su participación en el proyecto, como son la Mitsubishi Materials Corporation (MMC) y la Internacional Copper Association (ICA).

Otra novedad es la inclusión dentro del proyecto de una línea de trabajo orientada al desarrollo del sistema BRA para áreas semiexpuestas. “El mercado para la infraestructura del BRA en zonas expuestas probablemente va a estar maduro mucho después del término del proyecto…mientras –señala Arancibia- será necesario atender el avance paulatino de la industria hacia aguas intermedias, más expuestas, pero claramente no protegidas del océano”. [subir]