Programa de Agricultura de Precisión (PROGAP)
Cuando la imagen
es todo
El PROGAP se destaca en la viticultura
chilena, con modernas herramientas para
la obtención y análisis de datos
georreferenciados. Especial impacto ha
tenido el uso de imágenes multiespectrales
que mejoran el diagnóstico, la toma de
decisiones y la eficiencia en el uso de
insumos.
La imagen ya no sólo es un
tema de interés para el
marketing de la agricultura
exportadora chilena, sino que
se ha convertido en un
concepto altamente sensible
para aumentar la eficiencia y
la rentabilidad, todo gracias al
uso de nuevas tecnologías para
obtener información a través
de imágenes multiespectrales.
En esta línea trabaja un equipo
de investigadores del Programa
de Agricultura de Precisión
(PROGAP), integrado por las
facultades de Agronomía
(laboratorio de geomática) y
de Ciencias Físicas y
Matemáticas (laboratorio para
recepción y análisis de
imágenes nova) de la
Universidad y la estación
Quilamapu (Chillán) del
Instituto de Investigaciones
Agropecuarias, donde el
programa es liderado por el
ingeniero agrónomo Stanley
Best.
Actualmente 20 mil hectáreas
de las viñas más importantes
del país son monitoreadas con
este sistema que brinda mayor
eficiencia en la toma de
decisiones, posibilitando una
optimización mayor en la
producción a través de la
aplicación racional de los
insumos de acuerdo a la
necesidad real de las zonas de
manejo.
El académico e investigador
Juan Alberto Barrera, director
del PROGAP, explica que en las últimas décadas la agricultura
ha generado una mayor
demanda en el desarrollo de la
tecnología de sensores remotos
multiespectrales. Esto se debe
principalmente a la variedad
de problemas que se presentan,
como deficiencias nutritivas e
hídricas, plagas y
enfermedades, malezas,
variabilidad de los suelos,
variaciones en los ciclos de
crecimiento, clima y geografía,
entre otros.
Las plantas reflejan la luz según
su arquitectura y estado
fenológico, contenido de
clorofila en las hojas, de
humedad, plagas y
enfermedades, factores que
afectan la respuesta espectral
de la superficie sometida a
observación remota.
Un método para obtener
imágenes multiespectrales es
a partir de sensores
multiespectrales
aerotransportados (fotografías
aéreas), que registran la
refracción radiométrica de los
viñedos, refracción que se
separa en bandas espectrales
con las cuales se pueden
obtener imágenes e índices de
vegetación, que desde el punto
de vista de la matemática se
elaboran a partir de la
combinación algebraica de las
diferentes bandas espectrales
obtenidas a través de la
teledetección, que es capaz de
entregar información muy útil
y que en el caso de las viñas
chilenas les ha permitido tener un índice de la variabilidad de
vigor de sus plantas y claridad
sobre los factores que estaban
afectando y diferenciando el
crecimiento vegetativo, explicó
Barrera. [subir]
Mapeo de áreas de vigor
El vigor de una planta es el
resultado del tipo y la
profundidad de suelo, del agua
que recibe y de la radiación
solar que la afecta, todos
aspectos que deben manejarse
adecuadamente para obtener
uva y vino de calidad.
El PROGAP ha demostrado que
el empleo de imágenes
multiespectrales relacionadas
con índices de vegetación
permiten subdividir áreas o
bloques de cosecha basada en
el vigor de las plantas. Los
especialistas creen que la
segmentación de bloques
puede resultar en una
maduración de los viñedos más
uniforme, potenciando la
calidad del vino producido.
Mediante las imágenes
multiespectrales y la derivación
de los índices espectrales, se
obtuvo la información que
permitió desarrollar mapas
precisos de las diferentes áreas
de vigor. En dichas
investigaciones se ha trabajado
en base a datos de la calidad
química de las uvas, aunque
no es propósito de este proceso
definir la calidad organoléptica,
ya que dicha tarea corresponde
al enólogo y dependerá de las
necesidades de producir uno u
otro vino. Pero lo que sí se
puede determinar son las
condiciones químicas de las
uvas por sector homogéneo,
precisó el director del PROGAP. [subir]
Beneficios
Pese a que no es posible
todavía inferir directamente de
una imagen espectral la
madurez de un fruto, sí se
puede usar esta tecnología para
establecer zonas de iguales
valores de madurez. De esta
forma es posible realizar un
calendario de cosechas, según
zonas de igual estado de
madurez, las que han sido
previamente definidas
mediante la correlación con las
muestras de terreno en cada
zona clasificada por vigor. Esto
permite establecer una
secuencia de cosecha,
brindando la oportunidad de
mejorar la maduración de
aquellos sectores más
atrasados. Con esto, las viñas
evitan confundir mostos de
diferentes características de
maduración, protegiendo
especialmente las uvas de
mejor calidad y evitando su
dilución en una masa
indiscriminada.
Para el riego es también muy
relevante, ya que permite hacer
mapas de necesidad hídrica
que permiten conocer el estrés
dentro de un área o cuartel
específico y de esa forma elegir
el criterio de riego más
adecuado de aplicar.
Por último las imágenes
espectrales también hacen
posible la elaboración de un
mapa de área foliar, muy útil
para el manejo agronómico del
viñedo. [subir]
El Futuro
Según explica Juan Alberto
Barrera, la idea es que el
PROGAP evolucione hacia un
centro especializado. Por ello
están comenzando a trabajar
con exportadores de manzanas
y duraznos. El objetivo es
similar a la viticultura de
precisión, con la diferencia que
el hilo conductor de las
investigaciones es la
trazabilidad (historial del
producto desde su plantación
y cultivo hasta la cosecha y
eventual procesamiento). Para
ello, explicó Juan Alberto
Barrera, están modificando una
serie de programas
informáticos para dar respuesta
a requisito, omnipresente en
los mercados internacionales
más exigentes.
En una línea similar se
encuentra un proyecto para
establecer un modelo operativo
que garantice la trazabilidad
de los productos aplicados a
los arándanos, con el objeto
de responder a las directrices
de normas internacionales
como la Eurogap (monitoreo
de aguas, personal y fruta).
Otra iniciativa sobre la cual hay
especial interés es la
elaboración de un mapa
regional de carga de polen por
agrupaciones botánicas,
generando un número de clases
o zonas con características
melíferas diferentes. |