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Dirección de Investigación de la Universidad de Concepción - Nº 5 - Marzo 2004

 

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PROYECTO FONDEF

Biotecnología acuícola

A través de un proyecto Fondef, un equipo de investigadores del departamento de Oceanografía está trabajando en la optimización de la tecnología de cultivo del choro zapato (Choromitylus chorus) en sus diversas etapas, para promover el desarrollo de la actividad a nivel industrial y el fortalecimiento de las exportaciones.

Una parte importante de la iniciativa -que se centra en el hatchery que mantiene la Universidad en la Estación de Biología Marina en Dichatoestá orientada a subsanar, a través de técnicas
biotecnológicas, un problema que hace poco viable la comercialización del recurso en el exterior: el color de las gónadas en las hembras de tonalidad café negruzca, que produce rechazo en el consumidor.

Los investigadores intentan aumentar el porcentaje de individuos machos en cultivo y/o modificar el color de las gónadas de las hembras a tonalidades más claras. Para ello se plantearon tres
alternativas: el cruzamiento selectivo de individuos más claros, el tratamiento vía hormonas para inducir un cambio de sexo y la
manipulación cromosómica.

La primera línea de trabajo estaba orientada a investigar diferentes poblaciones a lo largo del país en busca de individuos con color menos intenso, para obtener luego de cruzamientos sucesivos a lo largo de varias generaciones, organismos más claros. El análisis de las poblaciones, sin embargo, no arrojó grandes diferencias de tonalidades, por lo que estaárea de intervención fue desestimada.

Tratamiento hormonal

Sustancias animales y vegetales, así como las hormonas contenidas en las gónadas masculinas del choro zapato, han sido probadas para inducir la formación de machos.

El tratamiento hormonal se aplica en las primeras etapas de desarrollo, antes de la ocurrencia de la diferenciación sexual, en una talla que se sitúa entre los 2 y 2,5 centímetros.

En las primeras pruebas se desechó la inyección directa de las sustancias por ser altamente invasiva, así como el uso de productos vegetales por su toxicidad. Los mejores resultados se han obtenido con las hormonas animales y del choro zapato, que se administran a través de baños periódicos. La mayor dificultad, en el caso de las hormonas propias, radica en los altos volúmenes de adultos que hay que macerar para extraer las hormonas.

También se han realizado pruebas con sustancias androgénicas, que son utilizadas en humanos, para aumentar la expresión masculina.

Organismos triploides y neomachos

En la manipulación genética se han definidos dos caminos, que se sustentan en un acabado conocimiento de las características cromosómicas de la especie. Estos son la obtención de individuos
triploides (dotados de tres set de cromosomas) y la generación de organismos neomachos a través de la ginogénesis.

La triploidía produce, en un 98 a un 99%, seres asexuados que, al obviar el desarrollo de gónadas, concentran la mayor parte de su energía en la producción de tejidos, lo que implicaría mayores tasas de crecimiento y, en el caso del choro zapato, la desaparición del color café de las gónadas en las hembras.

En este caso, la intervención se lleva a cabo en el momento de la fecundación. En el proceso natural de los bivalvos, el gameto masculino llega con un set cromosómico, mientras que el ovocito lo hace con dos. Al entrar el espermio en el ovocito,éste libera dos corpúsculos polares, formando una célula haploide que se fusiona con el núcleo del gameto masculino, generando un individuo diploide. Con el uso de sustancias químicas, que se aplican con éxito en ostras y ostiones, se evita la expulsión del segundo corpúsculo polar. Así, los organismos quedan dotados de tres sets de cromosomas, dos aportados por la hembra y uno por el
macho.

La segunda alternativa en el manejo cromosómico consiste en la generación de organismos ginogéneticos, donde sólo interviene el ADN materno. La técnica consiste en eliminar el material genético de los gametos masculinos sometiéndolos a radiaciones ultravioletas. Desprovisto de su ADN, el espermio, al unirse con el óvulo, sólo cumple la función de inductor de la división celular, siendo necesario restituir la diploidía evitando la expulsión del segundo corpúsculo polar.

Como resultado se obtienen individuos diploides de carácter femenino que, posteriormente, se someten a tratamientos hormonales para su masculinización.

Los resultados definitivos de estas experiencias podrán comprobarse cuando los individuos alcancen la talla de 5 centímetros.

 

Aquiculture Biotechnology

 

 
     
 
 
     
 
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