Su clima es templado, sin registrarse temperaturas extremas, lo que otorga especiales condiciones para la actividad agrícola. Por otra parte, posee fuentes de regadío abundantes (ríos Itata, Diguillín y afluentes), y su geografía en general de relieve llano, permitiendo el desarrollo, aunque en escala menor de ganadería variada (vacunos, caballares, ovinos, porcinos, etc.)

Es una zona prioritariamente agrícola, debido a que se producen grandes cosechas de trigo, remolacha, papas, tomates, lechugas, posee una gran extensión para la crianza ganadera, consecuencia de ellos son las queserías como "El Roble", "Los Tilos", "San Ignacio", entre otras. Además se han introducido nuevos cultivos tales como la frambuesa, kiwis, pepinos, espárragos.

A parte de su vía de comunicación, posee contacto vial interno expedito con otras comunas, lo cual le permite un intercambio comercial y de servicios de envergadura y con perspectiva de un mayor desarrollo a futuro. Posee también potencialidad turística y ecoturística, recurso factible de desarrollar y de potencias. Es una comuna que ha alcanzado gran desarrollo urbano, 90% de pavimentación, 85% de alcantarillado y 99% de alumbrado público y domiciliario. También las comunicaciones se han incrementado con la puesta en marcha y ejecución de proyectos de telefonía rural. Su población actual fluctúa entre los 18.000 y 20.000 habitantes divididos entre zona urbana y rural.