La Toxina botulínica previene la liberación de ACh desde las sinapsis colinérgicas.
El efecto a la OC es bloqueado debido a que su respuesta compromete al SNC, activación de fibras simpáticas preganglionares y activación de las postganglionares así como también de la médula adrenal y posterior liberación de catecolaminas. La toxina botulínica al impedir la transmisión ganglionar previene la respuesta a la OC.
La respuesta a la EsV es bloqueada debido a que su efecto depende de la liberación de ACh en dos sitios: ganglio parasimpático y a nivel vago/nódulo sinusal. La toxina botulínica impide la liberación de ACh en estos dos sitios.